Aunque el decreto de su creación que data del año dos mil, establece que las Islas Marías continuarán como área natural protegida en la categoría de Reserva de la Biosfera, sin que se permita la pesca ni el turismo, y que la gran parte de la porción marina y terrestre debe ser destinada a la conservación y preservación de ecosistemas y especies; grupos ecologistas han externado su preocupación luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador decidiera cerrar el centro penitenciario de las islas Marías para convertirlo en un centro cultural y recreativo. Por ello, ambientalistas de diversas organizaciones hacen un llamado al gobierno federal para tomar estrictas medidas que eviten el daño al ecosistema marino de las islas.
Durante los más de ciento diez años en que funcionó la prisión federal, eran contadas las embarcaciones que podían surcar Las aguas que rodean las islas, además de que esa región estuvo ausente de cualquier actividad pesquera o turística, por lo que se convirtió en un verdadero santuario para diversas especies como el tiburón que pudieron desarrollarse en su ambiente natural.
Ecologistas como Juan Francisco García, del grupo ecológico “Manglar” hacen un llamado al gobierno federal para mantener libre de la afectación de los seres humanos ese ecosistema, que es el hábitat de numerosas especies y que podría estar en riesgo de ser dañado por la llegada de numerosos visitantes. García asegura que debe tenerse sumo cuidado con la región del océano que rodea a las islas Marías.
“Estos lugares se han conservado vírgenes y creo que es algo delicado. La situación debe ser trabajada por especialistas y debe haber mucho control en cuanto a los visitantes”.
Los grupos ecologistas no se oponen a la idea de hacer de las islas un centro cultural tal como lo ha planteado el presidente de la república, pero sí insisten en que deben tomarse medidas de control para mantener el respeto que debe existir hacia la naturaleza, ya que la contaminación por parte de los turistas puede destruir el hábitat.
Juan García también comentó: “Creo que la idea de crear aquí un centro cultural será algo que dará la oportunidad de que las personas tomen consciencia sobre las condiciones que guardan estos lugares y que aún se pueden rescatar áreas naturales como esta”.
Se espera que, para el verano de 2020, comience a operar el centro cultural y medio ambiental de las islas marías que se llamará “Muros de Agua, José Revueltas”.
