Con 88 votos de 118 posibles, Nacho Peña es electo rector de la UAN 

Con 88 votos a favor de 118 posibles, Jorge Ignacio Peña González fue electo rector de la Universidad Autónoma de Nayarit para el periodo 2016-2022.
Sus más cercanos contendientes Humberto Lomelí Payán y Carlos Rea se recibieron 29 y un voto respectivamente; Abel Gómez, Carlos Betancourt, Armando Briseño, Octavio Camelo y Santiago Llera quedaron en cero.
Encabezada por el rector saliente, este 31 de mayo se llevó a cabo sesión extraordinaria del Consejo General Universitario para elegir al sucesor de Juan López Salazar entre los ocho candidatos registrados.
En una votación histórica, por lo que representó la presión mediática y la cantidad de candidatos registrados, cada consejero emitió su voto a viva voz y argumentando las razones para su elección.
El acto protocolario para la toma de posesión del maestro en ciencias Jorge Ignacio Peña González será el 19 de junio, cuando asuma el cargo por seis años, hasta el 8 de junio 2022.
Peña González es licenciado en Administración, con maestría en Estudios Regionales y el cargo más reciente que desempeñó fue el director de la secretaria de docencia en la UAN.
Con el lanzamiento de la convocatoria, el dirigente del Sindicato de Personal Académico (SPAUAN) y el de la Federación de Estudiantes (FEUAN) manifestaron públicamente su apoyo al maestro Peña; en tanto que el dirigente de los trabajadores administrativos (SETUAN) lo hizo por Humberto Lomelí, por lo que ya se perfilaban las tendencias.
En reciente encuentro/debate, los ocho candidatos dieron a conocer sus propuestas y puntos de vista acerca de temas fundamentales para la comunidad universitaria y que deberán estar en la agenda rectoral en la próxima administración.
La comunidad universitaria, tanto docentes, estudiantes y administrativos, considera que hay asuntos que requieren inmediata atención tales como: auditoría y transparencia en el manejo de fondos de pensiones y jubilaciones; dar paso a la inmediata reforma administrativa, educativa y política; en tercer lugar cambios y mejorar al proceso de elección de rector; en cuarto lugar acabar con trabajadores “aviadores” en la universidad, así como establecer mecanismos de transparencia y rendición de cuentas en todos los sectores universitarios.
Los aspirantes coincidieron que al interior de la UAN se debe aplicar una auditoría que arroje información fidedigna que permitan aclarar el destino de las aportaciones de la federación y los recursos generados a través de cuotas de inscripción y otros pagos de estudiantes, y con los resultados fincar resultados a los responsables del mal manejo e iniciar una reingeniería financiera.