Transporte público un desastre

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  • Rutas descuidadas, camiones en muy mal estado, choferes con vocabulario de carretoneros y todavía amenazan a subir el precio del pasaje

Múltiples quejas se hacen oír con respecto al estado que guarda el transporte público en la ciudad, ya que los permisionarios del autotransporte público, se dedican fortalecer y mejorar los vínculos con políticos de altas esferas, comentaron dos usuarios.

Don Eduardo nos comentó que el trabaja en la construcción en la colonia El Rodeo y tiene su domicilio en la colonia Comerciantes, por su puesto su sueldo es de un jornalero, por lo que tiene que estirarlo para que le alcance en el sustento de una familia compuesta por siete miembros, tres hijos varones y cuatro mujeres, de los cuales ya todos tienen edad escolar  y de su trabajo debe salir para todo. Su mujer también le ayuda comercializando nopales.

El dice que debe tomar un camión y una combi para llegar a su trabajo “al principio podía venir a comer a la casa, pero cuando terminaba la semana, ya no me alcanzaba, tenía que madrugar más para cruzar toda la colonia y luego llegar a tomar la combi”, nos comenta.

Su compañero y amigo es de la colonia Oriental y pasa las mismos problemas para salir a tomar la combi que los lleva a su trabajo.

“Tenemos dos meses trabajando en esa zona de la ciudad, pero en días pasados teníamos que ir hasta El Pedregal y era peor”, se queja Toño.

“Ahora que a esto se sumamos que los camiones apenas andan, porque hay en su mayoría camiones que están en mal estado, y ahora nos dijeron que van a meter camiones nuevos, pues sí, pero que van a subir el pasaje a siete pesos, a donde nos van a mandar, si de por si no nos ajusta con lo que ganamos, porque nos suben el pasaje, que porque van a meter camiones nuevos, y a nosotros no nos suben los sueldos, que no la frieguen. Es obligación del gobierno que nos den servicio de transporte para movernos a nuestros trabajos y a los estudiantes a sus escuelas, pero con eso de que nos van a subir, pues no sé qué vamos hacer”, explica Eduardo.

Otra razón por la que se quejan los trabajadores, es porque dicen que se han dado cuenta que los dueños de los camiones y gente que está involucrada en el negocio del autotransporte se ponen de acuerdo entre ellos para ayudar a los políticos en turno que buscan algún puesto público y se venden, no tienen ninguna consideración, ni moral para dar servicio, ellos sólo ven esto como un negocio nada más, se expresaron.

“Me ha tocado ver y escuchar cómo vienen peleando entre ellos cuando se juntan dos camiones, y el pasaje sin tener nada que ver le toca padecer este tipo de incidentes, al grado de llegar hasta los golpes después de los insultos y las groserías que se dicen entre ellos que parecen carretoneros; y la forma en que se suben a manejar deja mucho qué desear, porque a veces andan con los pantalones rotos y todos sucios, greñudos y sin rasurar. No estamos peleados con las personas que andan en este aspecto por necesidad o porque no tienen dónde asearse, pero estos se considera que tienen una asociación y se rigen por un sindicato que los controla, pero no les llama la atención ni porque van fumando o hablando por teléfono”, se quejan los trabajadores.

Comentan los quejosos porque quieren subir los impuestos el gobierno federal y aquí les dan a los más pobres la puñalada por la espalda al querer subir la tarifa hasta 7 pesos, siendo una de las más alta de la República.

Si una persona gana 100 pesos al día, pues el padre se gastará 14 pesos para ir y venir del trabajo o de plano caminará si tiene la posibilidad de hacerlo y los hijos también tendrán que caminar a la escuela, porque por el pasaje dejarán de comer.

Alguien tendrá que comprar los alimentos, porque la señora de la casa no tendrá dinero para el pasaje. La renta, el vestido, la medicina, ¿Quién las pagará? ¿Santa Claus o los Santos Reyes?

 

Por Pedro Amparo Medina

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