Navidad: la magia de esperar lo bueno

lectura de 2 minutos

¿Recuerdan la víspera de la navidad cuando eran niños?. Para quienes nos tocó vivir en la infancia la magia de escribir una carta pidiendo los juguetes que queríamos recibir, dormir casi a la fuerza la noche del 24 de Diciembre y después despertar el 25 con la sorpresa de buscar los regalos; la navidad nunca perderá esa magia de aquellos momentos felices. Esa sensación de esperar lo bueno, de dormir con una sonrisa y desear despertar lo antes posible porque se sabe que tendremos una gran alegría, pocas veces se repite en la edad adulta. Recuerdo que no siempre se recibían precisamente los regalos que se habían pedido, pero eso no era lo importante, sino la alegría de recibir y de además compartir esa alegría con otros.  En este 2012, lamentablemente muchos nos hemos acostumbrado a esperar lo peor.

Hoy quiero pensar que también esta navidad traerá lo bueno. Que recibiremos la mañana del 25 de Diciembre el país que queremos, el abrazo que añoramos, la salud que necesitamos, la sonrisa que esperamos ver. Más aún, creo que cada uno puede dar algo a los demás esta navidad, y contribuir a que al menos para algunos sea mejor de lo que esperan. Aún en los pequeños detalles del entorno personal. Podemos ceder el paso al vehículo que va a salir del estacionamiento, dejar pasar a quien lleva prisa en la caja del super o hacer una caricia a un niño que llora.

Les deseo que revivan esa emoción de esperar lo bueno, de estar seguros y en familia con la certeza de que en unas horas todo será mejor. Quiero pensar que este deseo no es ingenuidad sino esperanza.

Felices fiestas y que tengan la alegría de recibir una sorpresa con lo que más desean.

FELIZ NAVIDAD.

Recientes