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Libres las tres mujeres detenidas el 20 de noviembre y recluidas en El Rincón

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Un juez federal giró la orden de libertad para tres mujeres y los ocho hombres detenidos el pasado 20 de noviembre durante las protestas en el Zócalo, en apoyo a los normalistas de Ayotzinapa. Ninguno de los delitos imputados fue comprobado.

Poco antes de las cuatro de la tarde Liliana Garduño, Tania Damián y Hillary González salieron del Cefereso número 4 de Tepic, Nayarit en donde permanecieron ocho días prácticamente incomunicadas. Los hombres salieron del Centro Federal de Readaptación Social número 5, en Villa Aldama, Veracruz.

Familiares recibieron la noticia antes de las diez de la mañana en Tepic, en donde estaba programada una manifestación por la liberación  de las tres jóvenes, según explicación del abogado, porque fueron agredidas y detenidas arbitrariamente, sin elementos legales que las inculparan.

Quedó comprobado que ninguno de los detenidos el 20 de noviembre en el Zócalo capitalino se conocía entre sí, por lo que no se pudo configurarse el delito de asociación delictuosa, tampoco el de motín ni el de tentativa de homicidio.

En conferencia de prensa, los padres de Liliana Garduño y Tania Ivonne Damián Rojas, así como  la mamá de Hillary Analí González narraron cómo recibieron la noticia de la detención y el trato que les dieron elementos de seguridad.

A Enrique Rendón le negaron información de su hija en la SEIDO (Subprocuraduría Especializada en Investigación contra la Delincuencia Organizada); Tania, estudiante de sociología, permaneció incomunicada más de 25 horas, le tomaron declaración preparatoria con un defensor impuesto. Tania fue golpeada, presentaba golpes en brazos y cara (párpado derecho),

El padre de Liliana explicó que su hija había salido del trabajo y de la Seido le llamaron para informarle que la habían detenido e incomunicado “porque iba pasando y tomaba fotos y videos”.  Pudo hablar con su hija de 3 a 5 minutos. Luego no supo más. El sábado le avisaron que estaba en el penal de Tepic. “Mi hija no tenía necesidad de eso, estudia y trabaja, es madre soltera. Ella recibió golpes y patadas por parte de los granaderos. En la pierna presentó una herida.

Hillary Analí González, de 22 años y estudiante de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM; su mamá, Ana Cruz Olguín, dijo “me siento muy dolida por todo lo acontecido, porque mi hija está realizando una tesina basada en movimientos sociales, motivo que la ha llevado a participar en algunas marchas.”

“Mi hija fue reportada como desaparecida, yo la reporté a Locatel, a la PGJ, a ministerios públicos y derechos humanos y no aparecía. Desde la noche del 20 de noviembre hasta las 11 de noche del otro día. La información me llegó a través de las redes sociales, pero no aparecía.”

“Yo no estaba haciendo nada – dijo a su mamá- me caí, y los policías se amotinaron y empezaron a patearme y me tomaron y me llevaron.”

Las jóvenes recluidas en el penal de El Rincón recibieron poca atención mediática, en comparación con los hombres apresados. El abogado Jesús González Alcántara, vocero del instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, explicó que la información acerca de la detención había sido muy vaga y hasta extraoficial; adelantó que pedirán a las autoridades que definan si hay otras órdenes de detención pendientes de ejecutar.

Antes de las diez de la mañana, vía internet, el abogado  recibió la noticia desde Xalapa: fueron liberados los 11. En Tepic, quienes organizaron y apoyaron a los padres de familia fueron integrantes del Movimiento Asambleísta de la Universidad Autónoma de Nayarit.

Trascendió que familiares de los once detenidos podrían continuar el proceso, ya que la liberación de sus hijas e hijos no anula el agravio recibido por las autoridades, ni los abusos cometidos, entre otros: la aprehensión arbitraria, golpes y lesiones, haberlos mantenido incomunicados y que se les negó el derecho a un abogado de su confianza, como en el caso de Tania Rendón. /Angélica Cureño/ reportera

 

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