A la insalubridad y pésimas condiciones se suma la improductividad en el rastro de Tepic; trabajadores decidieron no laborar la noche del domingo, avalados por el sindicato; la tesorería dejó de percibir más de 40 mil pesos -solo por el sacrificio de cerdos de empresas locales-, los comerciante perdieron mucho más; y se rumora que el dinero para la construcción del rastro TIFF llegó a las arcas del Estado, pero “se perdió”.
La descompostura del motor de la máquina peladora -no esencial para el proceso- fue el pretexto para suspender la matanza de 300 animales de empresas que abastecen el mercado local, técnicos calculan que comprarlo nuevo les hubiera costado 15 mil pesos.
Además de pésimas condiciones de higiene, con fauna nociva (ratones, gatos y perros) y de riesgo para los trabajadores, el rastro capitalino opera con maquinaria obsoleta, con 33 años de antigüedad. Arrumbada como chatarra por mucho tiempo, fue hasta el trienio de Justino “Tino” Ávila Arce (1999-2002) que se volvió a usar, antes mataban y destazaban animales en el piso.
Las condiciones del local son ruinosas, hay láminas podridas, cables con demasiadas enmendaduras, equipo obsoleto. Según reportes, en los tres años de esta administración no se le dio mantenimiento al equipo, ni han hecho mejoras, tanto que se ha convertido en un peligro para los operadores, lo mismo ocurre con las instalaciones “en tiempo de lluvias –con las goteras- nos mojamos más adentro que en los patios” comentan usuarios.
Advierten que las condiciones laborales son de alto riesgo, ya que el techo está por desplomarse. En cuanto al equipo de seguridad para los trabajadores (botas, mandiles, cuchillos) en esto también ha incumplido la administración municipal.
Al menos cuatro empresas contrataron servicios del ayuntamiento, generado ocho millones de pesos anuales, solo por el sacrificio de 200 cerdos diarios, 95 pesos por animal. Por las reses se cobra más, 120 pesos, pero son meno, más lo que se genera por la venta de vísceras y otros subproductos.
La calidad del trabajo entregado es mala. Continuos reportes indican que hay desaseo “en parte por la maquinaria y en parte por los empleados que buscan permanentemente pretextos para no hacer el trabajo” El resultado es la entrega de carne sin detallado, con pezuñas, “las tripas no las entregan completas porque se ‘pierden’. Hay merma, a los ojos de todos” comentó uno de los entrevistados “a veces no costea ni los 95 pesos pagados” agregó.
Comerciantes afectados, consideran que tanto abuso se debe a que “no hay otro lugar, y porque nadie reclama”. “es un monopolio” coinciden. Será hasta la próxima administración cuando exijan a las autoridades mejores condiciones y trato.
ALERTA POR LA SANIDAD
“Hay mucho problema, son totalmente inadecuadas las medidas de sanidad” declaró un entrevistado. Además de la presencia de fauna nociva en las instalaciones del rastro, se sabe que la labor del médico de sanidad animal no es avalada, ya que él certifica que la carne esté en condiciones de ser consumida, sin embargo el descuido –voluntario o involuntario- de los trabajadores provoca que las vísceras decomisadas (no aptas) queden dispersas y cualquiera se las lleve, lo que ocurre con frecuencia, “seguramente para venderlas a establecimientos locales”. Las normas de sanidad indican que deberían quedar resguardadas e incineradas.
PENDIENTE RASTRO TIF
Con respecto al anuncio del gobernador de construir un rastro TIF, en junio de 2013, el dirigente de los tablajeros en Tepic anunciaba el inicio de obras; en noviembre el Cabildo, apresuradamente, aprobó la venta del terreno del rastro con precio base de 21 millones de pesos. La prisa se debía a que la federación había enviado poco más 21 millones de pesos, el gobierno estatal pondría una cantidad similar y el Ayuntamiento contribuiría con el dinero de la venta del terreno, según informó la regidora Leticia García Rangel a medios locales. En febrero pasado el presidente municipal, Héctor González agradecía al jefe del Ejecutivo la obra, sin que se conociera aún el lugar ni las condiciones del proyecto.
Sin embargo en los pasillos del rastro se rumora que el proyecto quedó cancelado o suspendido indefinidamente, debido a que “el proyecto no se definió” aunque trascendió que el recurso federal llegó a las arcas del estado, pero fue aplicado en otro proyecto, “se perdió”.
Un Establecimiento Tipo Inspección Federal (TIF) es una instalación de sacrificio de animales de abasto, frigoríficos e industrializadores de productos y subproductos cárnicos, que es objeto de una inspección sanitaria permanente, en la que se verifica que las instalaciones y los procesos cumplan con las regulaciones que señala la SAGARPA para que los alimentos sean inocuos.
