Trabajadores de la Universidad Autónoma de Nayarit recibieron con recelo el pago quincenal; cheques, apoyos y becas fueron pagados días después; temen que una vez la administración de la UAN carezca de fondos para el pago de nómina.
El próximo 15 de mayo (Día del Maestro) podrán constatar si las cuentas de la máxima casa de estudios, una vez más, están en números rojos, como sucedió en diciembre pasado cuando no hubo dinero para pagar salarios y aguinaldos.
Las finanzas de la UAN atraviesan por una severa crisis iniciada años atrás, la administración no ha podido sanear y transparentar tanto rezago; trabajadores reiteran que Rectoría no ha entregado la información solicitada con respecto al manejo de cuentas, percepciones, pagos y estado de los fondos de pensión y jubilación.
Será el viernes 15 de mayo cuando podrán corroborar si hay fondos suficientes, ya que en esa fecha además del salario reciben dinero extra como regalo por el día del Maestro.
Sobre este mismo tema, el grupo de opinión Sentipensantes emitió el comunicado correspondientes al mes de abril, en éste fijan su posición con respecto a las mesas de análisis de la Universidad Autónoma de Nayarit y ante el próximo Consejo General Universitario.
“La reforma universitaria emprendida desde 2003 no consumó los cambios necesarios y dejó en la indeterminación una multitud de procesos administrativos, jurídicos, políticos y académicos” se lee en el escrito.
Opinan que a 45 años de la fundación de la Universidad Autónoma de Nayarit, el crecimiento de la plantilla de personal así como el incremento de áreas administrativas, de docencia y de investigación han diversificado y diferenciado la organización interna universitaria, sin embargo, el modelo de gobernabilidad y de representación no se ha reestructurado ni redefinido conforme a estas condiciones.
“Existen en la UAN una serie de procesos que suceden en la incertidumbre normativa, decisiones discrecionales que son tomadas a puerta cerrada y a espaldas de los universitarios. La ausencia o falta de información suficiente que transparente el fondo de pensiones y las cuentas universitarias de frente a la ciudadanía. La demanda de evidencias que expliquen lo sucedido con las finanzas universitarias, más allá de la relación de personal y gasto integrado institucional, recientemente publicado, son aún pendientes que deben ser atendidos” expresan.
El grupo de académicos opina que la UAN necesita un proceso de renovación consensual y participativo, que incluya exigir respuestas y soluciones a problemas torales. /Angélica Cureño/Reportera
