El asesinato de Gisela Mota, alcaldesa de Temixco, Morelos, reactivó la propuesta federal de implementar el mando único policial en todo el país, incluidos los municipios que lo rechazaron o los que aceptaron con restricciones, como el caso del municipio de Tepic, el único de los 20 ayuntamientos de Nayarit que no lo acató.
El gobierno federal, a través de la Conago, retomó la idea de entregar a los gobernadores el mando policiaco para mejorar la seguridad, pese a las voces discordantes, como la del presidente municipal de Tepic, Leopoldo Domínguez, quien con reservas firmó el Convenio de Colaboración entre instituciones policiales en noviembre 2014.
En esa fecha, la condicionante del alcalde capitalino fue que en tanto no produjera una excepción o emergencia los elementos de seguridad del ayuntamiento deberán permanecer en la policía municipal.
Será en días próximos cuando se abra de nuevo el intercambio de opiniones, en los tres niveles de gobierno, hasta llegar a un acuerdo nacional, según se dio a conocer.
La argumentación de Leopoldo, “Polo” Domínguez fue que no aceptaría una policía encapuchada, privilegiando el respeto a la autonomía reiterando que el mando y administración de la policía preventiva corresponde al ayuntamiento.
Además, como lo marcan todos los tratados internacionales que ha firmado nuestro país (…) queda establecido que las policías deben ser perfectamente identificables, dijo en su momento el alcalde.
La propuesta de un mando único policial surge en la administración de Peña Nieto, bajo el concepto que la corrupción habría infiltrado a los municipales.
Opositores al mando único argumentan que se entrega demasiado poder a una sola persona –el gobernante- además de que preguntan quién vigilará al operador del mando único, y qué garantía habría que no serían utilizados para protección del narcotráfico y líderes del crimen organizado.
Otra de las interrogantes es si la policía estará bien pagada y capacitada, si se dará una nueva ley de seguridad y de dónde saldrá el presupuesto para su sostenimiento./ Angélica Cureño/ reportera.
