Se llevan a cabo manifestaciones en contra de la reforma educativa y el “evaluación punitiva” en Tepic y algunos otros puntos del estado, sumándose a la movilización nacional.
Docentes en defensa de los derechos laborales se oponen a imposiciones de la reforma educativa; algunos se manifestaron fuera de los planteles en tanto otros lo hicieron frente a Palacio de Gobierno el pasado miércoles 1 de julio y este sábado.
Además de rechazar la que llaman “evaluación punitiva” también la reforma educativa al considerar que representa los intereses particulares, pero no mejoras a la calidad de la educación en las aulas.
Fuera del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) maestras y maestros reclaman “una verdadera reforma que transforme el viejo sistema educativo, que acabe con las mafias y la corrupción no que cambie de bando” y agregan que con las manifestaciones promueven “Un verdadero cambio en las aulas con el alumnado, y no contra sus derechos.”
Asimismo combaten porque sea evaluado el modelo educativo mexicano, lo mismo a quienes tienen el mando en las instituciones “y no se tome como pretexto un examen desabrido, amañado para correr a sus maestros” Comentan algunos manifestantes.
De acuerdo a la información reunida, la estrategia gubernamental es debilitar el sistema “tiene como uno de sus principales objetivos dejar sin empleo, y por ende sin sustento, a multitud de familias, no puede ser legítima” comentan.
Con respecto a la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación opinan que los magistrados están avalando los despidos que están por generarse.
La marcha de este sábado 4 de julio la realizaron integrantes de las secciones 20 y 49 del SNTE, pero al margen de las decisiones de sus dirigentes, según comentaron.
Docentes deberán someterse a exámenes, en caso de reprobarlo en tres ocasiones podrían ser despedidos o reubicados en el área administrativa.
La ley indica que un docente no puede solicitar la impugnación de los procesos ni de los resultados de otros, tampoco representados por sus sindicatos dejándolos indefensos y facilita la discreción y opacidad al otorgar plazas. /Angélica Cureño/ Reportera
