La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó portar armas de forma pública y fuera del hogar.
Por seis votos contra tres, los magistrados se ampararon en la Segunda Enmienda, que defiende la posesión de armamento como un derecho constitucional.
El debate en el mayor tribunal del país está relacionado con una ley del estado de Nueva York, que obliga a poseer un permiso que avale portar armas de manera oculta fuera del hogar.
Sin embargo, la legislación sostiene que quienes pidan esa solicitud deben demostrar algún tipo de justificación especial, más allá del deseo de protección.
Los demandantes argumentaron que ese requisito en la legislación hacía muy difícil que los solicitantes pudieran obtener el permiso, lo que convertía a la Segunda Enmienda en un privilegio limitado y no en un derecho constitucional.
El tribunal les dio la razón, pero dejó la posibilidad abierta a que los estados pongan otro tipo de limitaciones a portar armas, como la toma de huellas dactilares, pruebas de antecedentes o de cuadros médicos de salud mental.
La discusión ocurrió luego de que el 14 de mayo, un hombre disparó contra los clientes de un supermercado en Búfalo y mató a 10 personas.
El ataque estaba dirigido a la población afroamericana.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, calificó la decisión de la Suprema Corte como “reprochable” y se comprometió a promulgar una legislación estatal nueva sobre el control de armas.